El Ayuntamiento de Valencia da por finalizadas las obras de consolidación y habilitación del edificio de la antigua Harinera. La Tabacalera del Grao es una construcción enfocada en promover el Emprendimiento, tanto desde una perspectiva formativa, como en áreas del acometimiento innovador, las start-ups, la innovación social y el movimiento maker.
El equipo formado por Miguel del Rey, Antonio Gallud y Juan Ignacio Fuster han sido los responsables de realizar los procesos de restauración del proyecto de habilitación y equipamiento del espacio. En el desarrollo, se han restablecido en su interior oficinas y espacios dedicados a la innovación, con salas de reuniones y despachos entre los que se encuentran dos servicios municipales, Valencia Activa y el Servicio de Innovación y Gestión del Conocimiento. El plan de renovación se considera una intervención ‘continua’, en la que La Tabacalera del Grao retoma una nueva fase de su vida útil, durante la cual se adapta técnicamente a su tiempo, pero preservando su carácter, volumen y presencia arquitectónica en la ciudad. Sustituyendo de esta manera la que en el origen fue una estructura de madera por hormigón prefabricado.
Consta de varias estructuras construidas en diferentes etapas: el edificio Harinera (1921), complementado con el edificio Barben (1941), separados por un patio de servicio. En los años ’60 se completa con un anexo perpendicular y unos espléndidos silos, hoy desaparecidos. La fachada y los restos arqueológicos industriales presentes en el momento de la intervención han sido los elementos fundamentales de esta nueva vida del espacio.
Fotografías por David Frutos.